Las calorías vacías son aquellas que carecen de valor nutricional relevante. La mayoría de azúcares y grasas añadidos se consideran “vacíos” ya que no aportan gran cosa al organísmo en forma de vitaminas, minerales, fitonutrientes o fibra. Lo que sí ofrecen es un rápido aumento de barriga, muslos y caderas. Así que no dejemos que la expresión nos confunda; las calorías vacías son de todo menos vacías.
Dado que los alimentos con calorías vacías tienen muchas calorías y pocos nutrientes, conviene que nos centremos en alimentos que sean lo contrario. Los alimentos ricos en nutrientes como las verduras y frutas, ofrecen un valioso aporte nutricional sin disparar las calorías. Ir introduciendo cambios sencillos como sustituir la leche entera por la semidesnatada o cocinar pechuga de pavo en lugar de carne de ternera, es una magnífica forma de empezar.
Otra pista para identificar alimentos ricos en nutrientes es su contenido en agua. El agua añade volumen pero no calorías. Así que conviene iniciar la comida con una ensalada verde o un puré de verdura, potenciamos el volumen y el aporte nutricional.
Entre los productos de Herbalife que podemos usar entre comidas y que tiene pocas calorías, está la sopa de tomate Gourmet, un alimento delicioso y saludable. Además, ahora, con los fríos del invierno, entraremos en calor. Nada más que 104 calorías. Contiene fibra. Está riquísima, la verdad.
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